Bogotá y UNODC unen esfuerzos para promover el sello de Desarrollo Alternativo en mercados campesinos 

Más de 50 organizaciones de productores campesinos que sustituyeron cultivos ilícitos contarán con un espacio en las plazas distritales de mercado para comercializar sus productos que cuentan con el sello de Desarrollo Alternativo.

Bogotá D.C., 16 de octubre de 2019. La Alcaldía de Bogotá, a través del Instituto para la Economía Social (IPES), y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito firmaron un acuerdo por cinco años, el cual permitirá aumentar las oportunidades de comercialización para las comunidades vinculadas a los programas de Desarrollo Alternativo de UNODC.

Durante la firma del acuerdo, el Representante de UNODC en Colombia, Pierre Lapaque, agradeció el compromiso de Bogotá para apoyar las economías lícitas fruto de los esfuerzos de los programas de Desarrollo Alternativo. "Gracias a este apoyo, le abrimos las puertas a cientos de campesinos que están en el proceso de cambiar sus vidas, apostándole a la paz y la legalidad, y quienes merecen el apoyo de todos nosotros".

Por su parte, la Directora del IPES, María Gladys Valero, resaltó esta alianza como una oportunidad para fortalecer la competitividad de las Plazas Distritales de Mercado. "Con este acuerdo haremos que los comerciantes reciban fortalecimiento y asistencia técnica a través de la cooperación internacional. Todos nos vamos a beneficiar; los productores van a estar en las Plazas de Mercado Distritales, nosotros ampliaremos la oferta de productos que no teníamos en estos espacios. Y por último tendremos la posibilidad de fortalecer a nuestros productores campesinos en temas sanitarios y normativos para que accedan a todos los permisos de comercialización".

El IPES realiza este convenio con UNODC con el objetivo de desarrollar acciones de consolidación del Sistema Distrital de Plazas de Mercado para el mejoramiento continuo de los sistemas de abastecimiento de alimentos en coordinación con los departamentos y municipios productores, potenciando la comercialización de los productos, reduciendo el proceso de intermediación para contribuir al equilibrio entre comprador y productor y así apuntarle al fortalecimiento de los mercados campesinos.

Esta alianza además permitirá la reconstrucción del tejido social en las comunidades que optaron por sustituir cultivos ilícitos y le apuestan a la legalidad y el desarrollo comercial.