Declaración del Director Ejecutivo de UNODC con motivo del Día Internacional de la Mujer

 

Viena, 8 de marzo de 2018. El Día Internacional de la Mujer es una fecha para celebrar los logros y las fortalezas de las mujeres y las niñas de todo el mundo. Pero también es una oportunidad para reflexionar sobre los desafíos continuos y acordar acciones conjuntas para avanzar en la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres.

Se han logrado grandes avances para superar las desigualdades y crear sociedades inclusivas. Sin embargo, las mujeres de todo el mundo aún enfrentan desalentadoras brechas salariales en sus lugares de trabajo y un acceso desigual a la educación. Sufren el acoso y la violencia sexual fundamentados en prejuicios endémicos que afectan desproporcionadamente a quienes viven en el campo.

La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) está comprometida con este llamado global a través de sus programas en prevención del delito y justicia penal, para prevenir y detener la trata de personas, entre otras áreas de su mandato.

Estamos decididos a apoyar a las millones de mujeres y niñas que son víctimas del crimen y ayudarlas a convertirse en sobrevivientes.

UNODC también ha lanzado una nueva estrategia de género, en relación con los esfuerzos de las Naciones Unidas, que ayudará a garantizar que en nuestros lugares de trabajo cumplan con la igualdad y la equidad de género.

Al trabajar en conjunto, UNODC está aportando a que las mujeres y niñas puedan desarrollar todo su potencial, y sean tratadas con dignidad y respeto.

En el Día Internacional de la Mujer, y partiendo del Objetivo 5 de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, ratifico la promesa continua de UNODC a todas las mujeres y niñas: trabajaremos incansablemente para poner fin a la impunidad y la violencia, mejorar la protección y luchar por la justicia.