Viena/Bogotá, 26 de junio de 2014 - La superficie utilizada para cultivar plantas de coca en Colombia permaneció sin cambios en 2013 en relación con el año anterior, de acuerdo con el último monitoreo de cultivos de coca de UNODC. Aunque hubo algunas reducciones en superficies de cultivo en varias regiones, hubo aumentos en otras, dejando el total de unas 48,000 hectáreas sin cambios. La producción de hoja de coca disminuyó 14 por ciento debido a un menor rendimiento por hectárea.
El monitoreo anual, producido conjuntamente por UNODC y el gobierno de Colombia, utiliza imágenes satelitales y monitoreos en el terreno para adquirir toda la información relacionada con el cultivo y erradicación de la hoja de coca en Colombia. Los resultados indican que en zonas como la Central, la Amazonía y el Orinoco, hubo disminuciones en la superficie cultivada con hoja de coca de 15, 43 y 41 por ciento, respectivamente. En otras, como las regiones de Meta-Guaviare y Putumayo-Caquetá, y los departamentos de Norte de Santander y Nariño, hubo aumentos de 16, 22, 41 y 23 por ciento, respectivamente, lo que significa que el total nacional no tuvo cambios. Acciones de erradicación manual y por aspersión aérea por parte del gobierno fueron llevadas a cabo en 47,000 y 22,000 hectáreas, respectivamente.
El valor total de la producción de la hoja de coca en finca, y sus derivados (pasta de coca y cocaína base) fue de 313 millones de dólares (mdd) en 2013, un descenso de 18 por ciento respecto a la cifra del año anterior que fue de 381 mdd. Esto representa un 0.2 por ciento del PIB del país, y un 3 por ciento del PIB relacionado con la agricultura.
El número de hogares involucrados en el cultivo de la hoja de coca disminuyó en un 6 por ciento, comparado con 2012, para ubicarse en 61,700. Siguiendo una tendencia a la baja observada desde 2005, el ingreso promedio por cada persona involucrada en el cultivo y la producción de la hoja o pasta de coca, o de la cocaína base, bajó 13 por ciento comparado con 2012, y se ubicó en cerca de 1000 dólares al año.
Bo Mathiasen, representante de UNODC en Colombia, subrayó la importancia de apoyar los esfuerzos del gobierno colombiano para reforzar las instituciones del Estado, y el trabajo realizado en promover modos de vida alternos en la zonas afectadas por los cultivos de la hoja de coca. "Al ayudar a formular e implementar políticas públicas que refuerzan la capacidad de organización de la comunidad y que promueven el desarrollo alternativo con una visión social, de empresa y de negocio, UNODC ha contribuido a incrementar la capacidad del Estado y de la sociedad civil para luchar contra el problema de las drogas ilícitas."
De 2003 a 2013, los programas de desarrollo alternativo han beneficiado a más de 156,000 hogares en 361 municipios en todo Colombia, promoviendo el desarrollo social y económico en las zonas afectadas por cultivos ilícitos y dentro de las comunidades vinculadas con esta actividad, o en riesgo de estarlo.
Informe completo: Monitoreo de Cultivos de Coca Colombia 2013
Para obtener mayor información, comuníquese con:
En Bogotá:
Bo Mathiasen, representante de UNODC en Colombia
T: (+57-313) 873-5515| E: bo.mathiasen{at}unodc.org
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T: +43-1-26060-5764 | E: preeta.bannerjee{at}unodc.org
