Cocaína

crack/bazuca/blanca/bombita/coca/dama blanca/leidi/polvo de ángel

¿Qué es la cocaína?

La cocaína es un polvo muy fino de color blanco o marfil que actúa como potente estimulante. En su forma pura, la cocaína se extrae de la hoja de coca. La que se obtiene en la calle, puede estar diluida o "cortada" con otras sustancias para aumentar su cantidad. El crack es la cocaína procesada y mezclada con amoníaco o bicarbonato de sodio y tiene el aspecto de pequeñas escamas o cristales.

Las tasas de prevalencia en toda la vida correspondientes a la cocaína son generalmente del 1% al 3% en los países desarrollados, y las tasas más elevadas se registran en los Estados Unidos y los países productores de América del Sur.

¿Cómo se consume?

Por lo general, la cocaína se inhala, se aspira por la nariz o se inyecta, mientras que el crack se fuma.

¿Cómo afecta a los que la consumen?

La cocaína produce un estímulo muy intenso y una sensación de euforia. Además, suele provocar un aumento temporal de los niveles de agudeza sensorial y de energía, así como una pérdida momentánea del apetito y el cansancio.

¿Cuáles son los riesgos asociados a su consumo?

Puede producir, entre otros efectos a corto plazo, la aceleración de la respiración y el aumento de la temperatura corporal y el ritmo cardíaco. Cuando el usuario de cocaína está "volado", puede actuar de forma extraña, errática y violenta.

Las dosis excesivas de cocaína pueden producir convulsiones, ataque de apoplejía, derrame cerebral o insuficiencia cardíaca.

Su consumo prolongado plantea diversos riesgos de salud, algunos de los cuales dependen del método de ingestión. Si se inhala, puede afectar gravemente los tejidos de la nariz; si se fuma, puede provocar problemas respiratorios; si se inyecta, puede producir abscesos y enfermedades infecciosas. También puede plantear otros riesgos, independientemente del método de ingestión, como la dependencia, la malnutrición, la pérdida de peso, la desorientación, la apatía y un estado similar a la psicosis paranoide.

Otros riesgos

La mezcla de cocaína con alcohol es un cóctel peligroso que puede aumentar enormemente las posibilidades de muerte repentina. De hecho, es la causa más frecuente de muerte repentina debida a la combinación de dos drogas.

Como cualquier otra droga ilícita, la cocaína también obnubila la capacidad de discernimiento y aumenta las posibilidades que se tomen decisiones desatinadas, como tener relaciones sexuales sin protección o compartir agujas. De ahí que los que la consumen corren el riesgo de contraer el VIH/SIDA, hepatitis u otras enfermedades infecciosas.