Este módulo es un recurso para los catedráticos 

 

Temas clave

 

La corrupción existe en todos los países, sin importar el tipo de régimen o la situación económica. Tiene efectos negativos significativos en todas las áreas del bienestar humano y es percibida como uno de los principales problemas que ponen en peligro el desarrollo económico, el funcionamiento y legitimidad de las instituciones y procesos de gobierno, el estado de derecho y la validez del Estado misma. La corrupción es un fenómeno complejo que no tiene una definición homogénea. Un panorama general de las diferentes formas y definiciones de corrupción, así como sus efectos perjudiciales en todo el mundo está disponible en el Módulo 1 de la serie de módulos universitarios E4J sobre la lucha contra la corrupción. Para los propósitos actuales, cabe señalar que la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción (CNUCC) se abstiene de proporcionar una definición general del término «corrupción». En cambio, define diversos actos de corrupción y los clasifica como delitos, como el soborno y la malversación (en sectores públicos y privados), el tráfico de influencias, el abuso de autoridad y el enriquecimiento ilícito (CNUCC arts. 15-22). Con 187 Estados parte (hasta abril del 2020), la CNUCC ha atraído una adhesión universal, y los diferentes actos de corrupción definidos por la Convención pueden considerarse internacionalmente aceptados. El Módulo 4 y Módulo 5 de la serie de módulos universitarios E4J sobre la lucha contra la corrupción incluye discusiones más detalladas acerca de cómo estos diversos actos de corrupción se manifiestan en los sectores público y privado, respectivamente.

El concepto de derechos humanos es igual de complejo. Por lo general, los derechos humanos se agrupan en tres categorías, también denominadas «generaciones», para reflejar el orden en el que se crearon y reconocieron. Los derechos de «primera generación» son los derechos civiles y políticos, como el derecho a un juicio justo y a participar en procesos políticos. Los derechos de «segunda generación» son los derechos económicos, sociales y culturales, como el derecho a la salud y a la educación. Los derechos de «tercera generación» son los derechos colectivos o grupales, como el derecho a la libre determinación y al desarrollo. El concepto de las generaciones de derechos humanos es útil para comprender el impacto de la corrupción en los individuos y en la sociedad. Sin embargo, la agrupación de los derechos en categorías o generaciones no implica que se prioricen ciertos derechos con respecto a otros. Por el contrario, se considera que los derechos humanos son indivisibles y no tienen un orden jerárquico. Esto se analiza con mayor detalle en el sitio web de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH).

Numerosos académicos, profesionales e instituciones hacen hincapié en el fuerte vínculo que existe entre la corrupción y las violaciones de los derechos humanos. Algunos académicos han estudiado la correlación entre las violaciones de los derechos humanos y el aumento de la corrupción (Koechlin y Carmona, 2009, pág. 310; Ngugi, 2010; Peters, 2018). Esta idea de correlación también es compartida por la jefa del Pacto Mundial de las Naciones Unidas en África, Olajobi Makinwa: «Cuando hay corrupción, los derechos humanos desaparecen» (Transparency International, 2019). En su declaración ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en el 2018, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, recalcó que la corrupción «priva a las personas de sus derechos, aleja las inversiones extranjeras y depreda el ambiente. La corrupción crea desilusión con respecto al Gobierno y a la gobernanza, y suele encontrarse en la raíz de la disfunción política y la desunión social.» Como resultado, los órganos de derechos humanos han estado prestando cada vez más atención a la correlación negativa que existe entre la corrupción y el goce de los derechos humanos, aunque sea necesario un análisis empírico en cada caso para establecer una relación causal entre la corrupción y la violación de los derechos humanos.

El presente módulo explora una variedad de enfoques contemporáneos para comprender y explicar la relación entre la corrupción y los derechos humanos. Inicia con una breve explicación de los antecedentes del sistema de derechos humanos, que resultará útil para explorar la relación entre la corrupción y los derechos humanos. Luego, proporciona un panorama general del nexo entre la corrupción y los derechos humanos, haciendo hincapié en los efectos perjudiciales de la corrupción en la protección y el goce de los derechos humanos. A continuación se examinan en detalle en el módulo varios ejemplos de derechos humanos que la corrupción viola. A esto le sigue un análisis acerca de los diferentes enfoques para evaluar la relación entre la corrupción y los derechos humanos. Finalmente, el módulo analiza el valor de un enfoque de la corrupción basado en los derechos humanos. En este contexto, se cuestiona si la corrupción en sí misma debería ser considerada una violación de los derechos humanos, y se aclaran algunos de los beneficios de integrar perspectivas basadas en derechos humanos con esfuerzos de lucha contra la corrupción. 

Las siguientes secciones del módulo ofrecen una visión general de:

 

Siguiente: Breves antecedentes del sistema de derechos humanos
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