Ciudad de México, 09 de junio de 2020 – La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) a través del Centro de Excelencia para Información Estadística de Gobierno, Seguridad Pública, Victimización y Justicia (CdE), monitorea las tendencias de la violencia contra las mujeres en México a partir de las medidas de confinamiento asociadas al COVID-19.
En el contexto de la actual pandemia, el aislamiento en casa y las cuarentenas son esenciales para reducir la trasmisión del COVID-19, pero pueden hacer que las mujeres y niñas se vean atrapadas en ambientes abusivos. De acuerdo con el Estudio Mundial sobre el Homicidio 2019 de la UNODC, gran parte de la violencia homicida hacia ellas ocurre en la esfera privada y el principal agresor suele ser la pareja u otro miembro de la familia. Para muchas mujeres y niñas, la amenaza de violencia es mayor en sus propios hogares. En este contexto, la medición y monitoreo de la violencia familiar y por causa de género adquiere una relevancia aún mayor.
El análisis realizado por el CdE utiliza registros de carpetas de investigación tanto de las Fiscalías como de las Procuradurías del país y de las llamadas de emergencia al 911. Se revisan algunas conductas violentas hacia las mujeres ocurridas entre enero y abril de este año y años anteriores, lo cual permite observar cambios en distintos comportamientos antes y durante las primeras semanas del confinamiento.
A lo largo de los meses referidos, se presentó una disminución en el registro mensual de llamadas de emergencia por incidentes como violencia contra la mujer, abuso sexual, acoso y/u hostigamiento sexual, violación y violencia de pareja. Este fenómeno puede explicarse, en parte, porque las denuncias y el acceso a los servicios de emergencia de las víctimas pueden verse obstaculizados seriamente durante la pandemia.
El número de feminicidios mostró también una disminución; sin embargo, el homicidio doloso de mujeres si contabilizó un alza, siendo el único registro que reflejó un aumento durante el periodo analizado. Al contrario de lo que ocurre con otro tipo de delitos, las acusaciones de las muertes violentas no dependen de la capacidad de denuncia de las víctimas, y por ello, es relativamente más sencillo que estos crímenes sean del conocimiento de la autoridad. Es por esto que la UNODC recomienda monitorear de manera complementaria tanto las cifras de homicidios dolosos de mujeres y niñas, como las de feminicidios, para obtener un panorama amplio de la violencia en su contra.
El Secretario General de las Naciones Unidas, el Señor António Guterres, instó “a todos los gobiernos a que la prevención y la reparación en los casos de violencia contra las mujeres sean una parte vital de sus planes nacionales de respuesta contra el COVID-19. Los derechos y las libertades de las mujeres son esenciales para lograr sociedades fuertes y resilientes”. La Oficina seguirá sumando esfuerzos para contribuir a la medición de la delincuencia, en especial la violencia contra las mujeres y apoyar así el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 5: Igualdad de Género y 16: Paz, Justicia e Instituciones Sólidas.
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Para mayor información, favor de contactar a:
Centro de Excelencia de la UNODC: unodc-mexico.cde.estadistica@un.org
Vínculos de interés:
Monitoreando la violencia contra las mujeres durante el confinamiento por la pandemia del COVID-19
Estudio Global de Homicidio de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito
