COVID-19: la UNODC se une al llamado para garantizar medidas de salud para personas privadas de la libertad

 

Ciudad de México, 11 de junio de 2020 - La Directora Ejecutiva de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés), la Señora Ghada Waly, se unió al llamado para solicitar que se apliquen las medidas de salud pública pertinentes para resguardar el bienestar de las personas privadas de la libertad y otras personas en reclusión durante la pandemia de COVID-19.

La Señora Waly firmó esta declaratoria en conjunto con el Director General de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Señor Tedros Adhanom Ghebreyesus; la Directora Ejecutiva del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA), la Señora Winnie Byanyima; y la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la Señora Michelle Bachelet.

Las y los líderes de las instituciones mundiales en el ámbito de la salud, los derechos humanos y el desarrollo propusieron acciones concretas para proteger a estos grupos en situación vulnerable: “Conscientes de que el riesgo de que se produzca un brote de COVID-19 en centros penitenciarios y otros lugares de detención varía en función de cada país, subrayamos la necesidad de reducir al mínimo la aparición de esta enfermedad en esos entornos y de velar porque se apliquen medidas preventivas adecuadas destinadas a prevenir brotes importantes de esta enfermedad y en las que se tenga en cuenta la perspectiva de género”, afirma el documento conjunto.

Dentro de los lugares de reclusión resulta complicado mantener el distanciamiento social recomendado por las autoridades como una medida de contención del virus; además, en los centros penitenciarios conviven personas con asma, diabetes, cáncer, enfermedades coronarias, hipertensión, problemas respiratorios, discapacidad, quienes viven con el VIH-Sida y baja inmunidad, mujeres embarazadas y en periodo de lactancia y personas adultas mayores, todas ellas en especial situación de riesgo de contagio y vulnerabilidad.

La declaración propone las siguientes medidas: reducir el hacinamiento; velar por la salud, la seguridad y la dignidad humana; propiciar un acceso ininterrumpido a los servicios de salud; promover el respeto a los derechos humanos y a las disposiciones y orientaciones de las Naciones Unidas.

En este mismo sentido, la UNODC en México implementa los Estándares Avanzados de Naciones Unidas para el Sistema Penitenciario Mexicano (UNAPS, por sus siglas en inglés), un modelo de evaluación y certificación cuya finalidad es mejorar la calidad de vida y el entorno carcelario de la población penitenciaria.

A partir de este modelo surgió el cuadernillo Estándares Especiales UNAPS COVID-19 con la colaboración de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS-OMS) y ONU-DH. El documento promueve medidas sanitarias concretas y adaptadas al contexto mexicano con el fin de prevenir y contener la potencial presencia de coronavirus en centros penitenciarios.

El Cuadernillo Estándares Especiales UNAPS-COVID-19 fue enviado a los 33 sistemas penitenciarios del país y se encuentra disponible en el sitio web de la Oficina para los centros penitenciarios que deseen implementarlo.

A través de esta labor conjunta, las Agencias de las Naciones Unidas apoyan el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 3: Salud y bienestar y 16: Paz, Justicia e Instituciones Sólidas.

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Para mayor información, favor de contactar a:

Martha Orozco - martha.orozco@un.org

Vínculos de interés:

Declaración conjunta de la UNODC, la OMS, el ONUSIDA y la ACNUDH sobre la COVID-19 en prisiones y otros centros de detención

Cuadernillo Estándares Especiales UNAPS-COVID-19