Apoyamos a la Casa de la Mujer Indígena para que continúe prestando servicio a migrantes y víctimas de trata de personas

Mexicali, 29 de junio de 2021 – Ante la emergencia sanitaria originada por el COVID-19, la Oficina de las Naciones Unidas contra Droga y Delito (UNODC) en México, en coordinación con el Programa Global sobre Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes, hizo entrega de material de protección sanitaria a la Casa de la Mujer Indígena (CAMI) en Baja California para fortalecer la asistencia inmediata que este organismo proporciona a migrantes y víctimas de trata de personas.

La cooperación entre UNODC y la CAMI fue realizada en conjunto con el Gobierno de Baja California y el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), y fue posible gracias al financiamiento del Gobierno de Suecia.

En el evento de entrega participó el Especialista en análisis estratégico, implementación y enlace y coordinador de proyecto de UNODC, el Sr. Mario Cordero, quien señaló que “es de vital importancia trabajar de la mano con las comunidades indígenas, poner en el centro de todas las acciones a las víctimas e incorporar una perspectiva de género y de derechos humanos”.

Por otra parte, la Representante Legal de la CAMI, la Sra. Margarita Cruz, comentó: “Agradecemos el apoyo de UNODC por visibilizar el problema de la trata de personas en comunidades como la nuestra y por asegurar la protección del personal y usuarias en el contexto del COVID-19”.

De acuerdo con el Informe Mundial sobre Trata de Personas 2020 de UNODC, los factores de riesgo como el desempleo y la pobreza ligados a los efectos de la pandemia resultarán en un incremento de víctimas de trata de personas. Los tratantes y traficantes se aprovechan de las necesidades económicas y laborales de las personas en comunidades indígenas, por lo que resulta de vital importancia redoblar el apoyo hacia instituciones como las CAMI, que funcionan como espacios seguros para las víctimas de la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes, y han mantenido su operación a pesar de las circunstancias adversas ligadas a la emergencia sanitaria.

UNODC en México está trabajando para que los centros de refugio y atención continúen prestando apoyo a las personas en situación de vulnerabilidad y satisfagan sus necesidades diferenciadas, al tiempo que mantienen las medidas de higiene recomendadas para la contención del COVID-19.

Con esta actividad, UNODC continúa encaminando esfuerzos para el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 16: Paz, Justicia e Instituciones Sólidas.

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Para más información, favor de contactar a:

Mario Cordero: mario.cordero@un.org