UNODC anima a los operadores de justicia a desarrollar una cadena de respuesta proactiva que identifique casos de trata de personas

Lima, 28 de abril de 2021.- La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) coorganizó el Taller de Formación Especializada para la Investigación, Atención y Judicialización del Delito de Trata de Personas en Perú, actividad desarrollada en tres sesiones virtuales, del 26 al 30 de abril.

El taller, que contó también con la participación de CARE Perú, OIM y Alianza Pro Bono Perú, gracias al Programa Europeo Regional de Migración y Refugio, implementado por la GIZ, y apoyado por la Unión Europea y la Cooperación Alemana, estuvo dirigido a Fiscales de las Fiscalías especializadas en delitos de Trata de Personas y  tráfico de migrantes ; Policía de la Dirección contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes, integrantes de las Unidades de Asistencia a Víctimas del Ministerio Público; Defensores Públicos de Victimas del Ministerio de Justicia  e Integrantes de servicios de atención a víctimas de los Ministerios de Salud y de la Mujer.

Con el objetivo de fortalecer capacidades, compartir experiencias, identificar desafíos y buenas prácticas, Walter Hoflich, Oficial de la Iniciativa Track4Tip* de la UNODC en Perú participó con su ponencia Trata de Personas: Proactividad en la cadena de respuesta.

“En este mismo momento que nosotros queremos conocer más sobre este delito vinculado a la delincuencia organizada hay víctimas de trata siendo explotadas con diversos fines”, dijo. Por eso mismo -añadió-  la proactividad no solo es necesaria en la judicialización, sino desde el contacto inicial con el presunto hecho de trata de personas.

El especialista recordó a los asistentes que la UNODC es custodio del Protocolo para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas y, en ese sentido -dijo- es la primera guía de proactividad porque sanciona la finalidad de la explotación, lo que implica identificar casos de riesgo de trata de personas, conductas y medios orientados a la explotación.

“La cadena de respuesta a la trata de personas debe contar con eslabones que tengan en cuenta   áreas de fiscalización y de vigilancia en la comunidad, enfocándose en lugares y situaciones que forman parte de la cotidianidad del ciudadano”.

Al respecto, la ponencia también analizó como la pandemia de COVID19 ha modificado esa cotidianidad y ha incrementado la vulnerabilidad de las personas, sobre todo las que provienen de flujos migratorios. “Sin acceso laboral, sin medios económicos de subsistencia, las víctimas se incrementan mientras se hace complejo el acceso a servicios de asistencia”, dijo

Finalmente, animó a las decenas de asistentes a ponerse en el lugar de la víctima. “La investigación debe ser victimocéntrica, debe empatizar y sintonizar con la víctima; ello debe ser bajo enfoque de género, por ser las mujeres las mayormente afectadas por este delito, y atendiendo al interés superior del niño”, dijo. Al respecto, el señor Hoflich  recordó que el número de niños y niñas entre las víctimas de trata se ha triplicado en los últimos 15 años, según el  Informe Global sobre la Trata de Personas publicado por la UNODC en febrero de este año.

UNODC impulsa en Lima la capacitación de fiscalizadores y del equipo de agentes de seguridad ciudadana (conocidos como serenazgo) con el objetivo de fortalecer sus capacidades para identificar presuntos casos de trata de personas y generar un efectivo enlace con los operadores de justicia.

 

Sobre el programa TRACK4TIP

TRACK4TIP es una iniciativa de tres años (2019-2022), implementada por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), con el apoyo de la Oficina del Departamento de Estado de los Estados Unidos para Monitorear y Combatir la Trata de Personas / JTIP.

El proyecto beneficia a ocho países de América del Sur y el Caribe con acciones nacionales y regionales en Ecuador, Perú, Brasil, Colombia, República Dominicana, Trinidad y Tobago, Curazao y Aruba.

El objetivo general del proyecto es mejorar la respuesta de la justicia penal regional a la trata de personas, en los flujos migratorios de los países beneficiarios a través de un enfoque multidisciplinario y centrado en las víctimas, con acciones a nivel regional y nacional para identificar, prevenir y procesar casos.

 

Esta nota de prensa fue posible gracias al apoyo del Departamento de Estado de los Estados Unidos, en virtud de los términos del Acuerdo Nº SSJTIP19CA0027.  Las opiniones expresadas en el son las de su(s) autor(es) y no reflejan necesariamente los puntos de vista del Departamento de Estado de los Estados Unidos.

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