Encuentro sobre el rol del sector privado en la lucha contra la trata de personas en Trinidad y Tobago
Trinidad y Tobago, 24 de agosto, 2021. La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) participó de un encuentro con el sector privado para abordar la importancia de su rol en el combate contra la trata de personas.
“Colaboración en la lucha contra la trata de personas. ¿Qué puede hacer el sector privado para afrontar la trata de personas?”, fue el nombre del evento que se desarrolló con el apoyo de la Unidad Contra la Trata de Personas de Trinidad y Tobago.
Lissette Reyes, oficial de Track4Tip, fue la encargada de realizar una amplia explicación sobre este complejo delito que tiene entre sus principales víctimas a mujeres y a niñas. “El reporte global sobre trata de personas de la UNODC cifra en 50 mil a las víctimas a escala mundial, de las cuales el 50% son captadas para explotación sexual y el 38% para trabajo forzado”, explicó.
Reyes subrayó que los traficantes explotan a las víctimas de diversas formas y se infiltran en la economía legal globalizada explotando a las víctimas en muchos sectores económicos. “Aunque las pautas de la trata para el trabajo forzoso varían según los sectores económicos, por lo general, es el resultado de un deterioro de los derechos laborales, como salarios más bajos, jornadas laborales más largas, reducción de las protecciones y empleo informal”, añadió
Como guardiana del Protocolo de Palermo, la UNODC - organismo encargado de promover la lucha contra las drogas ilícitas y la delincuencia organizada internacional - ha desarrollado un amplio trabajo de fortalecimiento de capacidades en más de 150 países a través de oficinas regionales, de enlace y de proyectos en todo el mundo.
Su trabajo se fundamenta en prevención del delito, protección a las víctimas, procesamiento de los tratantes y en la construcción de mecanismos de coordinación nacional con el apoyo de la cooperación internacional.
Prueba de ello, es el desarrollo de la Iniciativa Track4Tip, transformado alertas en respuestas de la justicia penal, apoyado por la Oficina de Vigilancia y Lucha contra la Trata de Personas JTIP del Departamento de Estado de los Estados Unidos. El proyecto está siendo implementado y alcanza a ocho países de Sudamérica y el Caribe con acciones a nivel nacional y regional entre Ecuador, Perú, Brasil, Colombia, República Dominicana, Trinidad y Tobago, Curazao y Aruba.
El objetivo general del proyecto es mejorar la respuesta regional de la justicia penal a la trata de personas entre los flujos migratorios dentro de los países beneficiarios, siguiendo un enfoque centrado en la víctima y multidisciplinario, trabajando a nivel regional y local para identificar, prevenir y procesar los casos.