Camboya: Fondo Fiduciario de la ONU ayuda a una ONG a reinsertar a niños víctima de la trata de personas

Photo: UNODC English | Français | русский

4 de julio de 2012  -  El próspero comercio transfronterizo en Poipet, una ciudad camboyana en la frontera entre Camboya y Tailandia, atrae numerosas familias migrantes desde otras áreas de Camboya. No obstante, la carencia de oportunidades laborales ha llevado a un aumento de la tasa de desempleo y ha generalizado la pobreza, ya que la mayoría de los habitantes gana un dólar al día o menos.

A causa de las dificultades económicas, el trabajo infantil no sólo se ha extendido en Poipet sino que, a través del tráfico infantil y la migración insegura, los niños de Camboya son llevados más allá de la frontera para trabajar como mendigos y vendedores ambulantes en Bangkok. Se estima que los niños de Poipet pueden ganar entre 300 y 1,000 baht al día mendigando en las calles de Bangkok, una cantidad mucho mayor que el sueldo de un adulto en Poipet.

Uno de esos niños, Tomi, un chico de 8 años de edad, nació en la provincia camboyana de Battambang y vivió con su abuela hasta que su madre y su padrastro, que vivían en Tailandia, decidieron llevárselo a dicho país para ganar dinero.

En Tailandia, Tomi fue forzado a vender flores y mendigar en las calles de Bangkok. En un día bueno, podía ganar entre 800 y 1,000 baht (entre 25 y 35 dólares). Tomi a menudo se ocultaba de la policía tailandesa metiéndose dentro de cubos de basura. Un día fue apresado por la policía, que lo envió a uno de los centros de asistencia social del Gobierno, desde el cual lo repatriaron a Camboya.

Tomi llegó al Centro de Tránsito de Poipet, dirigido por el Gobierno, y desde allí fue remitido al Centro de Recepción de Damnok Toek en enero de 2011. Damnok Toek es una ONG camboyana que empezó su andadura en 1997 en Camboya para asistir a niños vulnerables y a sus familias. Esta ONG es una de las beneficiarias del Fondo Fiduciario de las Naciones Unidas para las Víctimas de la Trata de Personas que, a través del Fondo de Pequeñas Donaciones, financió el Centro de Recepción desde el mes de octubre de 2011, cuyo objetivo es ayudar a garantizar una correcta reintegración de los niños en sus respectivas familias y prepararlos para una vida independiente.

Durante su estancia en el Centro, Tomi participó en clases en las que aprendió a leer y escribir. También aprendió a tener una buena higiene personal y adquirió conocimientos sobre explotación laboral y trata de personas.

Entretanto, trabajadores sociales pudieron localizar y evaluar a su familia. Tomi fue finalmente devuelto a su abuela una vez se consideró que era seguro. Damnok Toek apoyó a su abuela con una pequeña donación para abrir una tienda de comestibles. Tomi ha vuelto a la escuela y espera ser profesor en su escuela local una vez se haga mayor.

Desde noviembre de 2011, 52 niños han sido atendidos en el Centro, recibiendo educación no formal, orientación psicopedagógica, habilidades y aptitudes sociales, y participando en actividades recreativas como arte, música, clases de informática y aprendizaje de inglés. Gracias a la búsqueda de sus familias y evaluación de las mismas, tres niños más han sido reintegrados en sus respectivas familias y serán monitoreados durante un año.

El Fondo Fiduciario Voluntario de las Naciones Unidas, dirigido por la ONUDD, fue presentado oficialmente en 2010 por el Secretario General Ban Ki-moon, y a través del Fondo de Pequeñas Donaciones apoya la provisión sobre el terreno de ayuda humanitaria, legal y financiera para las víctimas de la trata de personas. En octubre de 2011, el Fondo de Pequeñas Donaciones financió a 11 organizaciones de primera línea que trabajan con supervivientes de la trata de personas alrededor del mundo.