Santo Domingo, 30 de enero de 2024. La amenaza de la corrupción sigue siendo un desafío clave en el Caribe. Este acto delictivo facilita el tráfico ilícito porque permite que los grupos del crimen organizado eludan la detección y persecución por parte de las fuerzas del orden; socava la autoridad del Estado y su capacidad para gobernar de manera efectiva y legítima y debilita las instituciones y las estructuras de gobernanza.
Para garantizar respuestas sostenibles y justas en el ámbito de la justicia penal es esencial contar con una integridad institucional robusta, junto con el establecimiento de mecanismos efectivos de responsabilidad dentro de las agencias de aplicación de la ley.
La Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC) trabaja activamente para prevenir y combatir la corrupción, reconociendo su impacto negativo en la integridad institucional.
Con el fin de fortalecer la aplicación de estándares éticos y de integridad en las unidades de control fronterizo de acuerdo con la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción (UNCAC), UNODC, a través de CRIMJUST, se unió a AIRCOP (Proyecto de Comunicaciones en Aeropuertos), CCP (Programa de Control de Contenedores), SEACOP (Programa de Cooperación de Puerto a Puerto) y COLIBRI (Monitoreo y Control de Aviación General) para brindar capacitación a 35 unidades sobre ética e integridad en un taller realizado en República Dominicana los días 30 de enero y 1 de febrero.
Las autoridades de control fronterizo desempeñan un papel fundamental en la lucha contra el crimen organizado y, en esta labor, tienen la alta responsabilidad de mantener estándares éticos.
Esta capacitación abordó temas como el papel de las agencias de aplicación de la ley en la sociedad; las vulnerabilidades en la frontera y la identificación y gestión de riesgos de corrupción en la gestión fronteriza; fomentar reflexiones críticas sobre el papel de la integridad como parte del trabajo; los desafíos específicos en la gestión fronteriza y una mejor comprensión de cómo reconocer y responder a las amenazas a la integridad, reduciendo así el riesgo de corrupción en la realización de operaciones.
Uno de los principales objetivos de la UNODC en el marco del programa CRIMJUST es apoyar a los países beneficiarios en sus esfuerzos para combatir el crimen organizado a lo largo de las rutas de tráfico ilícito.
CRIMJUST tiene como objetivo fortalecer las investigaciones transnacionales, las acciones de justicia penal y la cooperación internacional. El éxito en la lucha contra el crimen organizado requiere instituciones de aplicación de la ley fuertes, sólidas e integrales.
En esta sesión participaron la directora general de la Dirección General de Ética e Integridad Gubernamental (DIGEIG), Dra. Milagros Ortiz Bosch, y la embajadora de la Unión Europea en la República Dominicana, Katja Afheldt.
El taller se llevó a cabo en colaboración con los expertos Alberto Arean Varela de UNODC República Dominicana, y Guglielmo Castaldo y Alvina Mangandi De Perdomo, del Centro Regional Anticorrupción de la UNODC para América Latina y el Caribe, con sede en México.
A través de este centro, UNODC apoya los esfuerzos de los Estados para prevenir y combatir la corrupción, en línea con la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción (UNCAC), respondiendo a solicitudes de orientación, apoyo técnico y desarrollo de capacidades, fomentando la coordinación y sinergias con otras iniciativas regionales anticorrupción.
Esta actividad también responde a los compromisos asumidos por los países que integran la Plataforma Regional para Acelerar la Implementación de la UNCAC en América Central (que incluye a la República Dominicana), expresados en la hoja de ruta adoptada en Roatán, Honduras, en abril de 2023.
CRIMJUST es financiado por la Unión Europea y por la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley de los Estados Unidos (INL).