Este módulo es un recurso para los catedráticos 

 

Informantes

 

Los informantes se utilizan a menudo en casos de delincuencia organizada. Existen cuatro tipos de informantes: un miembro del público, la víctima de un delito, un miembro de un grupo de delincuencia organizada o los mismos oficiales de policía. Puede referirse también a los informantes como «colaboradores de la justicia» o se les puede conocer como «testigos cooperadores» (UNODC, 2008).

La mayoría de los informantes son delincuentes que cooperan con la Policía a cambio de cargos o sentencias reducidas o de inmunidad procesal, dependiendo del sistema judicial. Sin embargo, en ciertos casos, algunos ciudadanos honestos desean denunciar malas acciones. Sea cual sea el caso, los informantes frecuentemente desean mantenerse anónimos. Muchos tribunales sostienen que la identidad de un informante puede mantenerse confidencial, pero esto no es universal. En algunas jurisdicciones, si la defensa puede demostrar que es relevante para el caso, se puede revelar la identidad del informante (Brown, 1985; Feuer, 2001; Schreiber, 2001).

Los informantes son económicos porque representan pocos gastos. En la mayoría de los casos, ellos cooperan a cambio de indulgencia en sus propios casos pendientes. Debido a que los informantes suelen tener información privilegiada, pueden ser de ayuda para presentar casos que de otra manera requerirían meses de investigación.

Hay un flujo bien documentado de figuras de la delincuencia organizada que se han convertido en informantes. Se puede explicar este cambio de pertenecer a un grupo de delincuencia organizada a informar sobre el grupo mediante tres factores relevantes (Jacobs, 1994):

  1. Las sentencias muy largas para muchos delitos relacionados con la delincuencia organizada fuerzan a los delincuentes a considerar la prisión como la solución permanente y como el lugar en el que vivirán hasta el final de sus vidas, en lugar de como solo el costo temporal por hacer negocios.

  2. Las posibilidades de protección de testigos (tratadas en el Módulo 9) brindan a un posible informante un camino para evitar represalias luego de testificar en contra de un grupo de delincuencia organizada.

  3. La salida más fácil: Muchos delincuentes involucrados en la delincuencia organizada lo hacen solo por dinero y, cuando los atrapan, buscan la salida más fácil sin importar si sus amigos o socios puedan resultar afectados.

El costo-beneficio de tener informantes disminuye en cierta medida por problemas de credibilidad. Por ejemplo, en sistemas legales que usan jurados, han ocurrido absoluciones en casos importantes de delincuencia organizada simplemente porque el jurado no creyó en el testimonio de los informantes. Este puede ser el caso cuando el Gobierno paga al informante, situación que ocurre en algunas jurisdicciones. En los casos que involucran informantes que no eran parte de un grupo de delincuencia organizada existe también el temor a que se revelen sus identidades eventualmente (Simons, 2003; Werner, 2014).

El bajo costo de los informantes y su habilidad para brindar información de manera más rápida y, en algunos casos, con un riesgo menor que las investigaciones encubiertas o la vigilancia electrónica sugiere que los informantes seguirán siendo una herramienta de investigación importante en los casos de delincuencia organizada. El artículo 26 de la Convención contra la Delincuencia Organizada identifica cuatro categorías distintas de información que se puede recolectar de los informantes:

  • La composición y la estructura de los grupos delictivos organizados;
  • Las conexiones con otros grupos delictivos organizados;
  • Los delitos que los grupos delictivos organizados hayan cometido o puedan cometer;
  • Los recursos o productos de delitos que pertenezcan a grupos delictivos organizados.

Hay algunos temas centrales en relación con la manera en que se maneja a los informantes, los colaboradores de la justicia o testigos cooperantes (UNODC, 2016).

  • ¿Se permite que todos los investigadores usen informantes o la posibilidad se restringe a oficiales especialmente seleccionados?
  • ¿Se protege la identidad de un informante cuando da su testimonio ante un tribunal?
  • ¿Existe una política sobre la protección de los informantes y sobre el testimonio de estos ante un tribunal?
  • ¿Se compensa a los informantes?

Estas preguntas nos hacen reflexionar sobre la necesidad de conseguir un equilibrio apropiado entre la necesidad de aplicar la justicia mientras se investiga un caso de sospecha de delincuencia organizada y el trato justo tanto de los testigos o informantes como de los demandados.

 
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